sábado, 13 de agosto de 2011

Viejecito.

Brillaba la noche en el camposanto. Tierra de pasados enterrados. Nacían los recuerdos donde no había más cielo que el suelo que pisaban los pensamientos, a la busca de la inmortal ausencia. Huesos y crisantemos, oraciones y depresiones, ¡qué lugar tan eterno! Daba miedo caminar por la espesura y la Luna bañaba la negrura.
Corría la lágrima sincera por la mejilla de mármol, de la escultura.
La Dama lloraba tanto, leyendo arrodillada la pequeña esquela inscrita en la sepultura.
Sombras, claroscuros, el vagabundo come el aire, sentado, sobre una fresca losa, al cobijo
del tiempo, de la inmensa soledad y del silencio espacial. Espera tranquilo mirando los edificios
ficticios de los duendes invisibles, que respiran en sus tumbas cerradas.
Duerme al amparo de unos brazos ancestrales, fantasmales pero queridos, amigos conocidos.
Ángeles de los vagones de trenes que compartieron largos recorridos de aliento y peligro.
Sueña en lluvias de ayeres, en nieves y atardeceres, en aquellos horizontes que jamás llegó a alcanzar, fuera de su luminosa imaginación. Se retiró del mundo, huyó de su olvido y tembló
emocionado, comenzando a andar, excitado, por el influjo de una senda que le llevaría  hacia
un viaje sin lastres, y a un entendimiento universal del conocimiento.
Se fusionó con los dioses del mar, formó parte de la naturaleza. Anduvo por ecos que le transmitieron sus propias palabras. Aprendió del cansancio de las plantas inmóviles.
Al final dejó la carretera y refugió su pobreza, perdida en alguna alcantarilla, cerró con llaves
de acero, las puertas de la calle.
Sus pasos callaron y le sedujo el llanto del cementerio.
Por la mañana no despertó, el frío le mató, su alma se fue con el viento.
Nadie lloró por el indigente, una leve plegaria bastó, para volver a la realidad cotidiana de la
que el anciano, escapaba satisfecho.
La hierba y las flores de nuevo crecieron, las estaciones siguieron su curso.
¿Y a quién le importa la historia sin nombre, de un desconocido parásito de la sociedad, fría como la losa de una tumba cerrada?

                             -1996-

15 comentarios:

  1. A la sol rabiosa de un sol de verano parece demasiado lejanos la muerte y el abandono.

    Un saludo

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  2. Pilar: Tienes toda la razón...y sin embargo están en el mismo lugar de siempre...Abrazos cálidos, a la fresca de la anochecida.

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  3. Hoy me has emocionado,, tanto ,,, que me quedo dentro lo que siento.


    Gracias por inmortalizar a esos seres tan despiertos,sobreviviendo entre tanta pesadilla.


    Saludos

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  4. Es cierto Kim, a quién le importa. En este mundo somos demasiados como para preocuparnos de aquellos que pasan sin fijarse en nadie. Y menos si no se fijan en nosotros. Todo cuanto se creó,se hizo para ser admirado y no se puede pasar de largo sin mirar ni decir al menos buenos días y condiós porque si no se hace, la soledad se puede convertir en algo peligroso.
    Casi me paso de largo sin decirte buenos días.
    Pero no lo he hecho a posta es que el tiempo no me da para más y a mi ordenador le ha dado por ponerse viejo lento y achacoso.
    Qué bien se está contigo Kim.
    Hagamos tres tiendas y quedémosnos aquí.

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  5. Interesante reflexión que me hizo pensar que yo he pasado junto a muchos desventurados, por quienes nadie ofrece ni un suspiro, pero leyéndote hoy me ayudas a reflexionar al respecto...gracias y besos del gorrión.

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  6. Los indigentes no cuentan, son detritus de la humanidad, no tienen nombre ni familia...se les ha descolocado algo en el cerebro, les gusta la indigencia...es un vicio, decía Dostoievski...sólo somos raciocinio...Tú, Kim, sufres por ellos...pero ellos nada saben de nada...y menos de ellos mismos...
    Un beso, Kim, como siempre me dejas pensando mogollón.

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  7. Me has conmovido por tu manera de mostrar una realidad. Estremecedor, doloroso y cruel... ¿Y a quién le importa? ¡Lo peor! ¿Alguna vez cambiarán las cosas? Dudo... ¡Felicitaciones por tus versos que desbordan sensibilidad! Un beso grande!!!

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  8. eso es solo otro ejemplo de insensibilidad a la hemos llegado...es terrible...pero es la realidad...

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  9. Amigos, estaré un tiempo sin internet...Disculpen las molestias.
    kimbertrancanut

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  10. Para el mundo no hay personas. Hay números y estadísticas. Es sencillo comprobarlo. Cuando pasa alguna tragedia no hablan de fulanito o menganito a menos que sea famoso, la noticia es "han muerto 100 personas en....", "la hambruna afectara a un millón de niños si no....", "hay tres millones de...".

    Las únicas veces que hay nombres y apellidos, son gente que encima, la mayoría de las veces, no ha hecho nada por nadie, solo alcanzar la fama de manera más o menos dudosa.

    Saludos

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  11. Kim, hace días que no vengo y me encuentro con que llevas mucho tiempo sin aparecer.
    Dime si te ocurre algo.
    s27mel@gmail.com

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  12. kimbertrancanut: Tecla, tranquila, reposa tus pensamientos...estoy bien...pero sin Internet, jajaja, espero llegar cualquier día de estos... besos y Abrazos

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  13. ¡Pero Kim¡...Si tecla te pone un mensaje y tú haces acuse de recibo...si lo estás viendo y yo te veo, con tu fotito y todo...jajaja.. explica por favor eso de internet...
    Un beso.

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  14. Ah¡¡ que estás en otras temáticas y andas por esos mundos de Dios y entras en algún ciber ¿no?
    Qué ignorante soy...

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