jueves, 29 de diciembre de 2016

Jaculatoria… (RIP)





“…Desnudemos nuestras pieles en carne viva, pongamos sal a la llaga. Que escuezan los hálitos vacíos del conocimiento. Sepamos olvidar lo innecesario para eternizar, dejemos por el camino, pasos que no crearon huella, vidas que no fueron vividas. Zurzamos las fisuras de la reflexión, enjuiciemos a los magistrados con las leyes de la razón, durmamos templados en la ética del sueño,  a falta de pesadillas amorales…inhalemos los ingredientes naturales, del caldo de la subsistencia…” Roguemos a los vientos, al cielo, al fuego, a la lluvia, a los  bienaventurados astros salvajes…más nunca a los dioses creados por ignorancias, tablas de salvamento o por energúmenos mercaderes sin escrúpulos en busca de heredades ajenas.  Seamos devotos del prójimo, del débil y frágil eslabón de la escala social. Luchemos por los derechos humanos, contra quién intenta que desaparezcan las libertades y las igualdades, forjemos organizaciones de unión en un mundo mestizado en razas, ideas, sentimientos, sexos…en pos de un individualismo cultural, multicolorista , creativo y constructivo, Combatamos a los que quieran crear dictaduras holocausticas y asesinar el  -lavado de cerebro- pensamiento colectivo independiente. Necesitamos un “buen capitalismo”, no el existente en el actual sistema, que cuenta en números y no en hombres y mujeres…que se eduque en la escuela en valores interiores de conducta personales y equitativos, el juicio, la comprensión etc. y no en competitividades de ser el mejor y el primero y ganar más riqueza y consumir materialismos en un falso “estado del bienestar” que nos induce a la frustración de no obtener los resultados perseguidos, a menudo como observamos se convierten en la degradación y el poder de la corrupción y la malversación. Debe permanecer y crecer la inteligencia y el buen estudio del raciocinio universal, necesitamos más Luther Kings, Gandhis, Kennedys, Teresas de Calcuta…entendimiento popular
“Destruyamos errores y construyamos autenticidades” Enseñemos a querer la tierra y a sus moradores, no a las banderas segregacionistas, canciones de alegría y positivismo, en lugar de himnos marciales…vivamos en constante aprendizaje, coherentemente y a ser posible  en paz.

20 octubre 2011

























viernes, 23 de diciembre de 2016

Pequeñas Antillas



                  
                             
 Plantaciones de cacao, caña de azúcar y oro verde (banana)…tránsito por las calles estrechitas de adoquines infectos, blenorrágico. En la plaza del pescao, Zanba el demonio juega al Kou Kou djèdjè…letras quemadas leídas en papel limón con estupefacción…los almacenes con tejados de aguilón de curaÇao permanecen tapiados con un rito sangriento. En sus puertas coloreadas de ténebre oscuridad, los aires ventean huracanados. Asusta el temblor, el eco indeciso, unánime imagen de recelo. Las aguas altivas de los mares se alzan empuñando lengua asesina que engulle a sus presas, devolviéndola a las fauces de sus orígenes más ancestrales.
Antes de la rebelión los fantasmas duppies ofrecen “un petit marronage” a los criollos prietos, blancos o trigueños que bailan y componen músicas con viejos barriles de petróleo, con patas de  conejo en las bocas y gallinas descuartizadas.
Se mestizan los cacerolas de acero (steel pan) con el soca, raggasoca y calipso…el cimarrón vocifera un papiamento isleño, prenden las hogueras y los poseídos, desnudados por mister Vaudou, enloquecen y gozan de sus flácidas carnes grotescas, pigmentadas de lujuria. Satíricos miembros erectos fecundan los violentados vientres que en un dionisiaco futuro albergará los infiernos dantescos del caribe y las áfricas… ¡ay África! Que estás en los cielos (y en EEUU, Madrid, Barcelona, Londres y París). No ha servido de nada la arena depositada en las entradas de los aposentos indígenas, esa popular creencia de que los ángeles caídos, maléficos, rebeldes, pecadores no traspasarán los umbrales sin haber contado uno por uno cada grano de arena… ¿calmar a los espíritus con religión?... ¡OH, Dios! Cuan desafortunados los que yacen sin fe.
 Bolsillos vacíos, cuartos menguantes…griterío clama desconcierto, reunión de masas, politiqueros parlanchines, brujos, curanderos y tribus de médicos ineptos. Parafernalia danza de la muerte, aguardiente, santeros y sus cultos ruinosos…enfermos ¡joder, si no hay un puto hospital!...corazón, mente, alma, al amanecer duerme el exorcismo y la tormenta amenaza con furia divina…enterrados bajo sus fuegos, los amerindios colonizados lloran, suspiran, oran a las saetas del olvido.


*Algunas definiciones Isleñas:
Kou Kou djèdjè: Juego del escondite.
"petit Marronage": Huir por un período de tiempo, para buscar la compañía de una mujer, o asistir a un rito de religión prohibida, o solo respirar unas cuantas bocanadas de Libertad...esta costumbre desembocó poco a poco en Rebeliones.
Papiamiento: Mezcla de diferentes dialectos sin ortografía establecida.
Soca: Música de ritmo más rápido y bailada al estilo oriental...surgida de la fusión del Soul y el Calipso.
Raggasoca: Fusión entre Soca y Reggae Jamaicano.
Steel pan (cacerolas de acero): Música con un viejo barril de petroleo.
















domingo, 18 de diciembre de 2016

Alguien garabateó mis entrañas.



Recuerdo al bajar del avión, el golpe denso de la calima en la cara, aquel clima abrupto me fulminó a fogonazos…el desierto oscureciendo, los cielos sangrando y el malecón atiborrado de ojos, observándome, bizqueando con curiosidad, personajes singulares de distintas castas, tatuajes y clases sociales, se congregaban allí solo para estudiarme y solazar su bostezo de jornadas simples y silenciosas. Aquellas gentes pretendían huir de la monotonía y el hastío, viendo desfilar a extraños y desconocidos viajeros que, llegaban del aeropuerto, y cultivando posibles enigmas de interés en las existencias de éstos, ingeniaban fantasías sin conocer sus realidades.



Malcom, el anciano guía vino a mi encuentro, obligándome, a desviar la panorámica, de una niña joven continental que pintaba en un lienzo mi pensamiento…eran colores grises, entelequias sin oasis…dibujó mi ánimo y yo le sonreí con cierta fascinación y condescendencia…

Caminamos unas horas hasta llegar a una gran tienda de campaña, ésta sería nuestro hogar durante las semanas que durase el exilio, que me había traído hasta estos extraños parajes, lejos de la civilización.

 Cansados, Malcom y yo nos derrumbamos en unas dormilonas de redecilla, el calor, el viaje y lo andado me subyugaron al hechizo del sueño, no tardé en atravesar las puertas de la percepción y mis pasos interiores marcharon tras la huella de la joven artista…Ella seguía con sus pinceles, junto a un mar de aguas bravas, trazó un horizonte lejano y le pregunté

¿Podré llegar hasta él?



Ella cerró sus ojos y susurró al viento…es una perspectiva onírica, le ayudará a desposeer la zozobra y la congoja que le afligen, su bajel navegará en calma, sin turbaciones ni cantos de sirena y conseguirá llegar hasta la orilla de la reflexión y el entendimiento.

A continuación la quietud  avivó el alma que facturaba excesivo bagaje en el tiempo, sentí ligero mi espíritu y miré a la muchacha…

Hermosa chiquilla ¿cómo logras aligerar mis enquistadas magulladuras? acarreo ciclos de ostracismo y persecución hacia mi persona…razono que de nuevo mi corazón torna a palpitar con medida uniforme y sé que tus bosquejos me serenan ¿Qué prodigio es éste?

Señor, conozco los colores de conciliación que tanta falta le hacen, no hice más que dibujar en su sueño…garabatear, abocetar sus ilusiones y necesidades internas y exhalar mi aura depuradora que en esta tierra le custodiará eternamente…

Estoy seguro de que no alcancé a despertar jamás…y ahora mismo me hallo en etéreo vagabundear entre los óleos y pinceles de aquella niña prodigiosa que sigue pintando mi verdad en su lienzo, mis auténticos matices de la existencia.

-Febrero 2015.